Deportivo y Sevilla cerraron la jornada de Liga jugando un
encuentro propio del lunes. Disputado, con pinceladas de calidad, pero
falto de ritmo. Solo Navas por los hispalenses y Valerón -que no se
retire nunca- parecían tener ganas de ofrecer un poco más. Al final, una
victoria importante para los andaluces que se cuelan en ?Champions?,
mientras los gallegos deben mejorar atrás para salir de la zona media.
Sin contar una nítida ocasión de Medel a los diez minutos, la primera mitad estuvo insulsa. Un palo de Navas y el disparo a la cruceta de Abel Aguilar fueron las únicas ocasiones claras para inaugurar el marcador. Negredo estaba demasiado perdido arriba, mientras los coruñeses trenzabas buenas combinaciones sin darle profundidad.
La dinámica
de juego espeso, vistoso a ratos, dejó paso en la segunda mitad a una
bajada física importante en los dos bandos. Eso supuso que Jesús Navas,
siempre un punto por encima, lograra hacer daño a la defensa rival. Es
lo que ocurrió en el tanto nervionense. En mitad de la calma, el
canterano hizo estragos con Evaldo y cedió a Negredo para que anotara a
placer. Sin hacer ruido, el Sevilla se colocaba por delante.
Oltra reaccionó incorporando a Camuñas junto a Nelson, quienes aportaron mayor movilidad que Riki. Pero el gol visitante había dejado tan noqueado a los locales, que Aranzubia regaló el segundo. Una cesión difícil de Marchena, la aprovechó Rakitic para hacer la típica presión que normalmente no conduce a nada. Pero esta vez sí. El portero no midió bien y golpeó al croata para ver cómo se escapaban los tres puntos de Riazor.@xalomonte
Sin contar una nítida ocasión de Medel a los diez minutos, la primera mitad estuvo insulsa. Un palo de Navas y el disparo a la cruceta de Abel Aguilar fueron las únicas ocasiones claras para inaugurar el marcador. Negredo estaba demasiado perdido arriba, mientras los coruñeses trenzabas buenas combinaciones sin darle profundidad.
Oltra reaccionó incorporando a Camuñas junto a Nelson, quienes aportaron mayor movilidad que Riki. Pero el gol visitante había dejado tan noqueado a los locales, que Aranzubia regaló el segundo. Una cesión difícil de Marchena, la aprovechó Rakitic para hacer la típica presión que normalmente no conduce a nada. Pero esta vez sí. El portero no midió bien y golpeó al croata para ver cómo se escapaban los tres puntos de Riazor.@xalomonte
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