El coruñés celebra hoy su 27 cumpleaños orgulloso de haber sido el único futbolista de Segunda que disputó todas las jornadas: "Ni en sueños lo hubiese imaginado"
E. COBAS| A CORUÑA "Ni en sueños" se podía imaginar Álex Bergantiños que acabaría convirtiéndose en el único futbolista de Segunda en disputar las 42 jornadas. Ha tenido que trabajar muy duro y nadie le ha regalado nada, aunque para él cada partido que juega con el Deportivo, su equipo de toda la vida, es un obsequio que no tiene precio. El coruñés celebra hoy su 27 cumpleaños "feliz y muy orgulloso" de haber tenido un papel tan protagonista. "No puedo pedir más. Ni en sueños me podía imaginar que iba a estar en el club de mi ciudad, jugándolo todo y consiguiendo el objetivo del ascenso. Es algo que nunca olvidaré", asegura.
El mediocentro saborea de forma especial el ascenso por lo que significa no solo para él sino también para sus familiares y amigos. Por eso este billete a Primera "no tiene comparación" con el que selló en 2009 cuando jugó cedido en el Xerez. Hay una gran diferencia "sobre todo por la carga emocional". "Allí la afición también se portó muy bien conmigo, pero aquello no se puede comparar con lo de ahora -matiza-. A Coruña es mi ciudad y el Dépor, mi equipo. Aquí es donde está mi gente".
Reconoce que para jugar 42 partidos -de ellos, 41 como titular- no solo hay que hacer méritos sino que "también hay que tener suerte". Las lesiones de Juan Domínguez, Borja Fernández y Jesús Vázquez propiciaron que Álex gozase de la suficiente continuidad como para asentarse en el once: "Hubo muchas circunstancias que ayudaron. El equipo ha funcionado bien, el entrenador ha mantenido el bloque y también hubo lesiones de compañeros. He trabajado y me he cuidado para poder estar siempre disponible y además me he librado de esa quinta tarjeta amarilla".
Guarda "muchos flashes en la cabeza" de las celebraciones posteriores al ascenso. Nunca olvidará "el subidón" tras el pitido final en el partido definitivo contra el Huesca: "Son muchas cosas". Desde el paseo en autobús por las calles hasta Cuatro Caminos -"tremendo"-, hasta la fiesta en María Pita -"espectacular"-, sin olvidar la visita nocturna a La Torre, "inesperada y novedosa".
Le queda un año más de contrato y está abierto a tratar ya una posible renovación, aunque cree que "es pronto para hablar de esas cosas". De momento, aparca el fútbol y ultima un merecido viaje a Nueva York "para desconectar unos días", sin olvidarse de la Eurocopa: "Me encanta ver el fútbol sin esa tensión de estar implicado". Sueña con repetir la próxima campaña algo parecido a lo de ésta, aunque "será difícil". "Estoy contento porque voy a jugar con el Dépor en Primera, que es lo que siempre quise. Después, ya veremos qué plantilla hay. Pelearé como siempre por intentar jugar, con trabajo e ilusión".fuente OC. @XALOMONTE