LA PORTADA DEL DXT

VICTOR: "OJALA PODAMOS HACER UN PROYECTO DE MUCHO TIEMPO"

Víctor desea tener un ciclo largo en el conjunto coruñés efe

La temporada pasada Víctor Sánchez del Amo, como si de un surfista se tratara, sólo podía coger una ola y, a pesar de que era mala, logró llegar con el Deportivo a la orilla a salvo. Ahora parece navegar en condiciones favorables pero advierte que nadie va a remar por el equipo, que jugadores y afición son los que deben fabricar esa “ola” que les lleve a puerto.
En una entrevista con EFE el preparador del Deportivo explica que el único camino hacia el éxito es el trabajo, se congratula de que el club al que defendió como futbolista siete años, y al que desde abril dirige desde el banquillo, vuelva a tener brotes verdes, y expresa un deseo, el de vivir otro ciclo largo en el equipo, esta vez como entrenador.
“La temporada pasada nos dimos cuenta que estando todos unidos, el equipo es más competitivo y somos capaces de hacer cosas dificilísimas, como sacar adelante el objetivo de la permanencia a pesar del calendario tan complicado que teníamos. Lo logramos gracias a la unión de todos los factores, jugadores y afición principalmente”, señala.
Eso es lo que quiere aprovechar ahora. “No podemos esperar a que nadie nos dé nada, a que venga una ola de fuera a empujarnos; la ola debemos ser nosotros, el equipo y la afición. Tenemos que trabajar para que sea lo más poderosa posible y nos permita ser muy competitivos”.
Cuando se hizo cargo del equipo para afrontar su primera experiencia como técnico principal se encontró con una crisis de resultados, falta de identidad en el campo, jugadores desmotivados y una afición dividida.
Por eso, lo primero que intentó fue “crear un clima adecuado”, porque “si la cabeza no está donde tiene que estar es muy difícil desarrollar ningún tipo de trabajo”. Con él, el Deportivo mejoró en el campo, más sólido, y contagió a la grada, que empujó hasta un final no apto para cardíacos en el que logró la permanencia con un empate en la última jornada ante el campeón, el Barcelona, en el Camp Nou.
La lección está aprendida: “La Liga es la competición de la regularidad, 38 jornadas muy intensas y hay que trabajar desde el principio para tratar de evitar esprines finales con los que recuperar la distancia perdida. Vamos a tratar de avanzar metros con regularidad desde ya”.
Víctor está “contento” con la plantilla que tiene, por ahora con una docena de incorporaciones, lo que ha supuesto un “trabajo muy difícil” por las limitaciones económicas del club, que a diferencia del año pasado ha firmado a casi todos los jugadores en propiedad y con contratos a medio plazo.
“Eso es muy importante porque tenemos el ejemplo de este año y lo difícil que es moverte en el mercado cuando tienes que cerrar diez o doce fichajes. Esa es una situación de riesgo. Lo ideal es tener un bloque sobre el que trabajar año tras año para perfeccionar, no para iniciar”, apunta. El técnico habla con vistas al futuro: “Ojalá podamos hacer un proyecto aquí de mucho tiempo porque estoy encantado de estar en A Coruña y en el Deportivo, un club en el que me siento totalmente identificado”.
Víctor atisba brotes verdes “después de haber estado en una situación (económica) de tanto riesgo que gracias a la directiva actual se frenó”.
“Ahora, el club está en un momento muy bonito, de crecimiento”, añade el entrenador, que mantiene “los pies en el suelo” y no eleva “de ninguna manera las expectativas” deportivas porque en la Liga “se compite contra los mejores”, con equipos con mayor presupuesto.
“Esa diferencia la queremos contrarrestar con trabajo, con ser más eficaces que los rivales y con la fuerza del grupo”, sostiene el preparador blanquiazul.
Él no parece dispuesto a permitir en el vestuario ninguna conducta individual que perturbe los intereses del colectivo y en el último entrenamiento de la semana dejó al margen del equipo al portugués Luisinho tras un encontronazo con Alejandro Arribas.

"EL GRUPO ESTÁ BASTANTE UNIDO"

El centrocampista, en la sesión del pasado sábado patricia g. fraga

La semana acabó con una situación que no cogió por sorpresa a  uno de los veteranos de la plantilla, Rubén Gracia, ‘Cani’, que pasó por vestuarios como los del Zaragoza, el Atlético de Madrid o el Villarreal y sabe que rifirrafes como el de Luisinho y Arribas, aunque no son frecuentes, sí suceden de vez en cuando. Por eso le restó trascendencia, si bien admitió que en esta ocasión las revoluciones subieron demasiado de vueltas.
“Ha habido una discusión entre dos compañeros que pasa en todos los equipos, aunque se ha subido un poco más de tono. Lo  hemos hablado y esperemos que no vuelva a pasar. Esto deja ver que el equipo está con ganas, que tiene ganas de hacerlo bien y es competitivo. Llevo años jugando y no es la primera vez”, comentó en la sala de prensa de la ciudad deportiva de Abegondo.
Víctor charló con sus jugadores sobre lo sucedido en la línea de lo que opinaría cualquier técnico. “No es que venga este entrenador y diga algo diferente a los demás. Todos sabemos lo que ha pasado y que no debería pasar, somos mayores para saberlo”, apuntó.
Analizando los motivos que llevaron a los dos jugadores a encontrarse en el césped, el centrocampista encontró una causa múltiple. 
“Es una mezcla de todo, que se acerca la Liga, que el equipo está con ganas, que hay mucha competencia, que tenemos una plantilla en la que no hay once fijos, que hay muchos jugadores optando a puestos y eso se ve en los entrenamientos, que son muy competidos”, declaró.
La cuenta atrás hacia la Liga está en marcha. Esta semana, al fin, comienza la competición oficial. En el vestuario ya había ganas de que ese momento llegara.
“Supongo que estoy como el resto de jugadores, con ganas de que llegue la competición y acabar la pretemporada, que es un periodo que no nos gusta mucho porque se sufre”, indicó.
Respecto a si se ve en la primera alineación, afirmó que hay mucha competencia y que la temporada es larga. “Intentamos luchar para estar en el primer once, pero no se acaba la Liga en el primer partido. El campeonato es muy largo”, comentó.
Cani admitió que el plantel de jugadores del conjunto coruñés es “mejor” de lo que podía prever cuando se sumó al proyecto.
“Veo una plantilla muy buena, donde hay muchos jugadores optando a jugar en muchos puestos y, aunque ha habido una pequeña pelea, el grupo está bastante unido porque hay muy buen vestuario”, señaló.
El centrocampista acabó la temporada pasada en el Atlético y previamente estuvo en el Villarreal. En su comparecencia, se refirió al concepto que tenía del Deportivo y a lo que se ha encontrado. “El Deportivo, desde fuera, lo he visto siempre bien. Una vez dentro, es un club familiar. La ciudad deportiva es muy buena y para luchar por evitar el descenso solos no vamos a estar. Creo que nos podemos salvar sin sufrir tanto”, aseguró.
Al respecto, indicó que el equipo está centrado en la lucha por la permanencia pero confía en lograrlo con más margen que la temporada pasada, en la que la salvación llegó en la última jornada y con muchos apuros.
“Los objetivos que creo que ha puesto el club, que es el que los tiene que poner, pasan por intentar salvarse sin pasar los apuros del año pasado, sin esperar hasta el ultimo momento. Creo y confío que va a ser así, que va a ser un buen año. Ojalá lo consigamos lo antes posible para mirar más arriba”, señaló.
Con ese “más arriba”, el centrocampista zaragozano no se refería a aspiraciones europeas. Esa meta es, en teoría, para otros, aunque nunca se sabe.
“Lo que quiero decir es que espero que no haya que estar luchando hasta el último partido. Lo de entrar en Europa esta muy caro hoy en día. Hay mucha diferencia de presupuesto entre los de arriba y los de abajo. Eso no quiere decir que no te puedas meter en esa posición, pero está muy complicado”, manifestó.
Sobre la política del club de reforzarse este año con jugadores en propiedad y muchos de ellos con contratos a medio plazo, Cani afirmó que no tiene por qué ser determinante, aunque  sí parece que pueda ayudar.
“Cada caso es muy particular, hay jugadores que estando cedidos se dejan todo y otros con contrato que pueden pasar un poco más. Personalmente, yo creo que si un jugador es propiedad del club, es un poco mejor”, explicó.
El centrocampista blanquiazul ha firmado por una temporada después de haberse desvinculado del Villarreal. Completó la primera parte de la pretemporada en solitario y aún está cogiendo la forma. En el Teresa Herrera fue uno de los elegidos por Víctor para el once. “Los minutos que tuve me dejaron sensaciones buenas. En general, el equipo me gustó. Sin estar al cien por cien me encontré bien”, zanjó.VIA IG.