El delantero anotó su primer gol con la camiseta del Deportivo frente al Castilla y aunque frente al Mallorca no marcó, a él le hicieron el penalti que anotó Sissoko aig
Nueve puntos de margen y el golaveraje particular con respecto a la UD Las Palmas a falta de 21 puntos por disputar. El regreso a Primera División parece cada vez más cerca, pero en el vestuario no se lanzan las campanas al vuelo, ni se vende la piel del oso antes de cazarla. No se da por hecho algo que todavía no se ha conseguido. La plantilla es cauta. El uruguayo Diego Ifrán defiende ese discurso prudente. El psicológo del club y el entrenador, Fernando Vázquez han convencido a los jugadores de que la meta aún está lejos. No hay que confiarse ni relajarse.
“Sin duda que eran muy importantes los puntos de Mallorca, pero como también lo fueron los anteriores y como lo serán los siguientes. Hay que seguir entrenando porque, hasta que no se logre matemáticamente, no nos relajamos”, comentó el delantero deportivista.
Mientras el deportivismo empieza a hacer cuentas sobre cuándo podrá celebrar el ascenso a Primera, los jugadores se centran únicamente en el encuentro del próximo sábado ante la Ponferradina en el estadio de Riazor. Es otra oportunidad de sumar los tres puntos.
“Obviamente que cuanta más diferencias le sacas a los rivales se ve más cerca, pero no se puede festejar hasta no lograrlo”, dijo sobre el ascenso.
El Deportivo, además, tuvo cierta dosis de fortuna en Mallorca en la primera parte. “En el primer tiempo estuvimos más flojos, pero en el segundo tiempo controlamos sin problemas y el equipo no se dará por vencido hasta que logre el objetivo”, declaró.
El equipo coruñés se adelantó con un penalti que el propio Ifrán provocó y que allanó el camino hacia la victoria en la isla, donde el conjunto balear opuso resistencia hasta el descanso y murió en la reanudación cuando el Depor anotó el segundo.
“Es un empujón en el área, me hizo despejar en vez de meterla, así que estoy contento”, dijo sobre la pena máxima que el colegiado pitó a favor del Deportivo y que anotó, con sangre fría, desde los once metros, el costamarfileño Ibrahim Sissoko.
Al igual que Fernando Vázquez, Ifrán asumió que el equipo no estuvo fino en el primer periodo. “En el primer tiempo no estuvimos completamente bien, pero tuvimos chispazos. En el segundo, se mejoró y se pudieron lograr los tres puntos”, explicó.
Él estrenó titularidad, pero no marcó, aunque sí contribuyó de forma decisiva a la undécima victoria lejos del estadio de Riazor. En las dos anteriores jornadas, el Cerro Chato salió desde el banquillo y marcó.
“Me sentí bien. Con los minutos que he ido teniendo, después del tiempo que estuve sin jugar, me iba acomodando y creo que voy mejorando”, comentó el delantero cedido por la Real Sociedad al Deportivo hasta final de temporada.
Ifrán peleó como el que más, recibió faltas y en muchos momentos estuvo por el aire por los choques con los rivales. “Estábamos un poco partidos y llegaban balones a disputar. Era lo que tocaba y había que disputarlos”, dijo sobre esas acciones.
El triunfo dejó buen sabor de boca, pero no se celebró de manera especial.
“El equipo está tranquilo, hacemos lo que tenemos que hacer. Ganamos y se festeja como cualquier partido. Es una alegría cuando se gana porque se hace un gran esfuerzo entre todos”, argumentó.VIA IG. @xalomonte
Mientras el deportivismo empieza a hacer cuentas sobre cuándo podrá celebrar el ascenso a Primera, los jugadores se centran únicamente en el encuentro del próximo sábado ante la Ponferradina en el estadio de Riazor. Es otra oportunidad de sumar los tres puntos.
“Obviamente que cuanta más diferencias le sacas a los rivales se ve más cerca, pero no se puede festejar hasta no lograrlo”, dijo sobre el ascenso.
El Deportivo, además, tuvo cierta dosis de fortuna en Mallorca en la primera parte. “En el primer tiempo estuvimos más flojos, pero en el segundo tiempo controlamos sin problemas y el equipo no se dará por vencido hasta que logre el objetivo”, declaró.
El equipo coruñés se adelantó con un penalti que el propio Ifrán provocó y que allanó el camino hacia la victoria en la isla, donde el conjunto balear opuso resistencia hasta el descanso y murió en la reanudación cuando el Depor anotó el segundo.
“Es un empujón en el área, me hizo despejar en vez de meterla, así que estoy contento”, dijo sobre la pena máxima que el colegiado pitó a favor del Deportivo y que anotó, con sangre fría, desde los once metros, el costamarfileño Ibrahim Sissoko.
Al igual que Fernando Vázquez, Ifrán asumió que el equipo no estuvo fino en el primer periodo. “En el primer tiempo no estuvimos completamente bien, pero tuvimos chispazos. En el segundo, se mejoró y se pudieron lograr los tres puntos”, explicó.
Él estrenó titularidad, pero no marcó, aunque sí contribuyó de forma decisiva a la undécima victoria lejos del estadio de Riazor. En las dos anteriores jornadas, el Cerro Chato salió desde el banquillo y marcó.
“Me sentí bien. Con los minutos que he ido teniendo, después del tiempo que estuve sin jugar, me iba acomodando y creo que voy mejorando”, comentó el delantero cedido por la Real Sociedad al Deportivo hasta final de temporada.
Ifrán peleó como el que más, recibió faltas y en muchos momentos estuvo por el aire por los choques con los rivales. “Estábamos un poco partidos y llegaban balones a disputar. Era lo que tocaba y había que disputarlos”, dijo sobre esas acciones.
El triunfo dejó buen sabor de boca, pero no se celebró de manera especial.
“El equipo está tranquilo, hacemos lo que tenemos que hacer. Ganamos y se festeja como cualquier partido. Es una alegría cuando se gana porque se hace un gran esfuerzo entre todos”, argumentó.VIA IG. @xalomonte