El técnico del Deportivo, Borja Jiménez, incrementó la exigencia del trabajo en la segunda jornada de entrenamiento de la quinta semana de la pretemporada con una doble sesión en Abegondo.
Fue el único día de la semana en el que la plantilla blanquiazul se ejercitó en horario de mañana y tarde, ya que para hoy y mañana se han planificado sendas sesiones matinales, mientras que el domingo tendrá lugar un partido amistoso contra el Real Madrid Castilla en Riazor a las 19.00 horas.
Tocó sudar
La jornada arrancó a las 10.55 horas con un entrenamiento de alta intensidad en el que el preparador abulense hizo sudar a los suyos.
Tras unos minutos de carrera, unos ejercicios de toques de balón y los rondos habituales, llegó el momento de subir las pulsaciones de los deportivistas, primero con unas tareas de cambios de ritmo y posteriormente con unos partidillos en espacio reducido.
“Venga, que ya esta tarde jugaremos un partido de once contra once y tendremos más espacios”, arengó Borja Jiménez a sus futbolistas durante un momento del entrenamiento matinal.
Los rondos de cuatro contra cuatro dieron paso a los partidos en los que se enfrentaron equipos de cuatro jugadores de campo y un portero.
Ejercicios de calentamiento pusieron fin al entrenamiento matinal, al que acompañó un intenso carlor y que se prolongó durante apenas una hora, ya que el equipo volvió a ejercitarse a las 19.00 horas.