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lunes, 4 de noviembre de 2019

LA PORTADA DEL DXT


REGRESO ESTA TARDE PENDIENTES DEL ESTADO DE SOMMA

El defensa comienza a ver la luz al final del túnel y afronta la recta final de la recuperación del esguince de rodilla que sufrió el pasado 25 de agosto en el partido ante la SD Huesca y que le ha obligado a estar parado más de dos meses.
Proceso lento
Un percance cuya recuperación ha sido lenta y en la que los Servicios Médicos pusieron especial cuidado, ya que el lateral en el pasado ya sufrió la rotura del ligamento cruzado de ambas rodillas.
En un primer momento, el club emitió un comunicado en el que indicaba que sufría una contusión y esguince en la rodilla derecha, aunque en ningún momento la entidad dio más información sobre el grado de la dolencia.
Además, en un primer momento la zona en la que había sufrido el golpe se encontraba inflamada, lo que dificultó en un primer momento arrojar un diagnóstico.
No obstante, tampoco posterioremente el club ha dado más detalles sobre el estado del futbolista, al que se ha visto cómo daba pasos en su recuperación en Abegondo.
Durante más de dos meses se le ha podido ver trabajando, muchas de las veces en solitario sobre el campo, y haciendo ejercicios específicos con los readaptadores del club. El paso inicial antes de sumarse al trabajo normal de entrenamiento junto al resto de sus compañeros.
La semana pasada, concretamente el jueves, se sumó al entrenamiento grupal, incorporándose en parte de una sesión suave y solo en algunas tareas. Mientras, otra parte del entrenamiento lo hizo en solitario, junto al readaptador del club Fran Molano.
Recta final
Esta semana será importante para seguir sumando sesiones a sus piernas y a su rodilla y corroborar que continúan las buenas sensaciones y la ausencia inestabilidad en la articulación. También serán entrenamientos importantes para Beto da Silva, que volvió a quedarse fuera de la lista de convocados ante el Fuenlabrada. El futbolista peruano es uno de los jugadores que suelen ser descartados por Luis César, algo que el técnico arousano admitió que le resultaba “doloroso”. El atacante, que apenas ha jugado 18 minutos este curso, realizó semanas atrás tareas personalizadas dentro del plan de trabajo para su puesta a punto.
Un trabajo extra para el ariete, en aras de fortalecer su musculatura para que esté listo y a disposición al cien por cien para Luis César.