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domingo, 25 de noviembre de 2018
DEPOR -2 OSASUNA -0
El Depor tiró ayer de oficio para sumar un triunfo de mucho mérito en la ‘piscina’ en la que se convirtió el césped de Riazor tras las intensas lluvias caídas durante todo el día. Una victoria que aúpa a los coruñeses al liderato de la clasificación, a la espera de lo que hagan hoy el Alcorcón y el Málaga.
El estado del campo condicionó un partido cuya disputa llegó a peligrar, dados los charcos que había en las diferentes zonas y que imposibilitaban la circulación de la pelota.
Natxo González introdujo varios cambios en el once, respecto al equipo que jugó en Almería cinco días antes. En el mediocentro, la baja de Álex Bergantiños por unas molestias lumbares abrió la puerta de la titularidad a Mosquera, a quien acompañaron como interiores Krohn-Dehli, que sentó a Edu Expósito, y Vicente.
Además, Fede Cartabia disputó su primer encuentro como titular desde el pasado 15 de septiembre. Su golazo en el Estadio de los Juegos Mediterráneos, que rescató un punto para los blanquiazules, le concedió la vuelta al once, al que también regresó Carlos Fernández tras perderse el duelo de Almería por estar con la selección española sub-21.
Con tantos problemas para que el balón rodara, ambos conjuntos apostaron por los pases largos, ya que jugar en corto suponía asumir demasiados riesgos.
El Depor logró ganarle la espalda a los centrales osasunistas en varias ocasiones, pero, cuando parecía que Quique o Carlos iban a llegar a la pelota y plantarse solos ante el meta rival, el esférico se frenaba en seco y anulaba la ocasión.
La primera gran oportunidad de los coruñeses tuvo lugar al cuarto de hora, cuando David Simón sirvió un gran centro al área que Quique González remató de cabeza, pero el exdeportivista Rubén Martínez despejó con una gran mano.
Excepto por esa acción, el conjunto rojillo se sentía como pez en el agua. Acostumbrado a los encuentros ‘embarrados’ e intensos, los de Jagoba Arrasate no arriesgaban lo más mínimo y buscaban el juego directo en todo momento.
De hecho, teniendo en cuenta que era imposible hilvanar juego, se echaba de menos a Christian Santos, un delantero que se pegara con los zagueros navarros y que va muy bien de cabeza.
En el minuto 27, se produjo la polémica del partido. Clerc, dentro de su área, cortó con la mano un centro de Fede Cartabia. Los deportivistas pidieron penalti, pero el vasco Gorostegui Fernández-Ortega no señaló la falta.
Apenas hubo fútbol en la primera mitad. El Depor, el único que trataba de generar juego, se encontraba con el impedimento del estado del césped, impracticable en algunas zonas, como en el centro del campo. Los herculinos se sentían incapaces de elaborar su fútbol ante un adversario que se encontraba con el escenario perfecto para tratar de mantener el 0-0 inicial y arrancar un valioso punto en un estadio en el que los coruñeses habían sumado cinco triunfos y un empate en seis encuentros.
Natxo González introdujo varios cambios en el once, respecto al equipo que jugó en Almería cinco días antes. En el mediocentro, la baja de Álex Bergantiños por unas molestias lumbares abrió la puerta de la titularidad a Mosquera, a quien acompañaron como interiores Krohn-Dehli, que sentó a Edu Expósito, y Vicente.
Además, Fede Cartabia disputó su primer encuentro como titular desde el pasado 15 de septiembre. Su golazo en el Estadio de los Juegos Mediterráneos, que rescató un punto para los blanquiazules, le concedió la vuelta al once, al que también regresó Carlos Fernández tras perderse el duelo de Almería por estar con la selección española sub-21.
Con tantos problemas para que el balón rodara, ambos conjuntos apostaron por los pases largos, ya que jugar en corto suponía asumir demasiados riesgos.
El Depor logró ganarle la espalda a los centrales osasunistas en varias ocasiones, pero, cuando parecía que Quique o Carlos iban a llegar a la pelota y plantarse solos ante el meta rival, el esférico se frenaba en seco y anulaba la ocasión.
La primera gran oportunidad de los coruñeses tuvo lugar al cuarto de hora, cuando David Simón sirvió un gran centro al área que Quique González remató de cabeza, pero el exdeportivista Rubén Martínez despejó con una gran mano.
Excepto por esa acción, el conjunto rojillo se sentía como pez en el agua. Acostumbrado a los encuentros ‘embarrados’ e intensos, los de Jagoba Arrasate no arriesgaban lo más mínimo y buscaban el juego directo en todo momento.
De hecho, teniendo en cuenta que era imposible hilvanar juego, se echaba de menos a Christian Santos, un delantero que se pegara con los zagueros navarros y que va muy bien de cabeza.
En el minuto 27, se produjo la polémica del partido. Clerc, dentro de su área, cortó con la mano un centro de Fede Cartabia. Los deportivistas pidieron penalti, pero el vasco Gorostegui Fernández-Ortega no señaló la falta.
Apenas hubo fútbol en la primera mitad. El Depor, el único que trataba de generar juego, se encontraba con el impedimento del estado del césped, impracticable en algunas zonas, como en el centro del campo. Los herculinos se sentían incapaces de elaborar su fútbol ante un adversario que se encontraba con el escenario perfecto para tratar de mantener el 0-0 inicial y arrancar un valioso punto en un estadio en el que los coruñeses habían sumado cinco triunfos y un empate en seis encuentros.
Sacó petróleo
Sin embargo, en el minuto 43, la escuadra coruñesa sacó petróleo en una jugada de Quique González. El delantero pucelano disparó a puerta, pero la pelota pegó en la pierna de un defensor, quedó muerta en el área y la enganchó Fede Cartabia, que sirvió una asistencia de lujo a Carlos Fernández, quien la envió al fondo de la red en boca de gol.
En la última acción del primer acto, el Osasuna tuvo el empate en un saque de esquina, pero Dani Giménez, que ha acostumbrado a la afición deportivista a vestirse de ‘superhéroe’ al menos en una ocasión por partido, evitó el tanto navarro con una gran estirada.
La segunda mitad se desarrolló sobre el mismo guion, con el Deportivo como único equipo que intentaba bajar el balón al piso, pese a la dificultad que entrañaba.
En el minuto 55, los locales pudieron aumentar su ventaja gracias a un centro de Saúl que cazó Carlos Fernández con una medio chinela, pero su remate, que salió muy blando, lo atajó Rubén en dos tiempos.
El guardameta de Coristanco, uno de los señalados del descenso del Depor a Segunda por sus numerosos errores, cuajó una gran actuación en su vuelta a Riazor. De hecho, en el minuto 64 evitó un golazo de Cartabia. El argentino sacó un zurdazo, desde el pico derecho del área, que iba a la escuadra, pero el arquero metió una gran mano que desvió el esférico, que se estrelló en el larguero.
Pero el meta no pudo evitar que el Depor sentenciara el duelo once minutos más tarde. Cartabia puso un saque de esquina en el punto de penalti, donde apareció Pablo Marí para marcar, de cabeza, su segundo tanto del curso.
A cinco minutos del final, Dani Giménez apareció de nuevo para evitar que los navarros se metieran en el encuentro. El vigués realizó un paradón tras un remate de cabeza que se colaba pegado al larguero.VIA IG.
Sin embargo, en el minuto 43, la escuadra coruñesa sacó petróleo en una jugada de Quique González. El delantero pucelano disparó a puerta, pero la pelota pegó en la pierna de un defensor, quedó muerta en el área y la enganchó Fede Cartabia, que sirvió una asistencia de lujo a Carlos Fernández, quien la envió al fondo de la red en boca de gol.
En la última acción del primer acto, el Osasuna tuvo el empate en un saque de esquina, pero Dani Giménez, que ha acostumbrado a la afición deportivista a vestirse de ‘superhéroe’ al menos en una ocasión por partido, evitó el tanto navarro con una gran estirada.
La segunda mitad se desarrolló sobre el mismo guion, con el Deportivo como único equipo que intentaba bajar el balón al piso, pese a la dificultad que entrañaba.
En el minuto 55, los locales pudieron aumentar su ventaja gracias a un centro de Saúl que cazó Carlos Fernández con una medio chinela, pero su remate, que salió muy blando, lo atajó Rubén en dos tiempos.
El guardameta de Coristanco, uno de los señalados del descenso del Depor a Segunda por sus numerosos errores, cuajó una gran actuación en su vuelta a Riazor. De hecho, en el minuto 64 evitó un golazo de Cartabia. El argentino sacó un zurdazo, desde el pico derecho del área, que iba a la escuadra, pero el arquero metió una gran mano que desvió el esférico, que se estrelló en el larguero.
Pero el meta no pudo evitar que el Depor sentenciara el duelo once minutos más tarde. Cartabia puso un saque de esquina en el punto de penalti, donde apareció Pablo Marí para marcar, de cabeza, su segundo tanto del curso.
A cinco minutos del final, Dani Giménez apareció de nuevo para evitar que los navarros se metieran en el encuentro. El vigués realizó un paradón tras un remate de cabeza que se colaba pegado al larguero.VIA IG.
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