| Actualizado 20 Octubre 2012 - 02:21 h.
Riazor solo ha visto una victoria, la única del equipo, esta temporada, en el arranque de la Liga quintana
La otra galaxia baja a la tierra esta noche en Riazor. El Deportivo recibe la visita del líder, el incontestable Barcelona, el equipo con mayor posesión de la historia. Llega mermado en defensa por las bajas, con Messi en el banquillo pendiente del nacimiento de su hijo, con los internacionales lastrados por el esfuerzo que hicieron con sus selecciones, pero su cotización no disminuye en un estadio en el que el Deportivo no le derrota desde 2008, hace cuatro años y cinco meses.
1. Misma citación pero podría variar el once -El técnico ha citado para el choque con el Barcelona a los mismos jugadores que se llevó a Vallecas antes del parón del campeonato. Sí podría variar el once.
Aquella victoria queda lejana en el tiempo. Demasiado. Pero echando la vista más atrás, los datos favorecen al Deportivo, que solo ha sufrido seis derrotas ante los barcelonistas delante de la afición de Riazor desde el ascenso de 1991. Son estadísticas más difíciles de mantener cada temporada. La diferencia de nivel entre ambas plantillas es como el día y la noche, el ‘2’ en la quiniela es la opción más probable, pero once guerreros, más que nunca guerreros, están dispuestos a cambiar el pronóstico y hacer que salte la sorpresa.
El Deportivo dejará en el vestuario el libro de estilo de Oltra y adaptará el manual para casos de inferioridad acusada como el de hoy. El equipo sabe que no puede permitirse el lujo de disputarle el balón al Barcelona, de ir de cara en el encuentro.
Tendrá que guardar la ropa y nadar muy de vez en cuando, en los momentos contados en los que el Barcelona suba con todo o baje la guardia.
El equipo coruñés está mentalizado para no discutirle el balón a los de Tito Vilanova, para no desesperarse cuando no lo tenga en su poder, para no perder la posición cuando el Barcelona lo juegue, para presionar cuando el rival llegue a la línea de tres cuartos de ataque.
2. ayudas atrás, intensidad, esfuerzo - No se pueden ahorrar una carrera, dar por perdido un balón. Los que jueguen deben agotar la gasolina, emplearse a fondo, aferrarse a la esperanza.
Los pupilos de Oltra están preparados para robar el esférico en algún descuido del Barcelona y para maniobrar con rapidez en campo rival y para tratar de llegar al área de Valdés y, sobre todo, materializar, que es lo más complicado ante el Barcelona.
Los números de Tito Vilanova en el banquillo son espectaculares, aunque con sobresaltos. El técnico, que debutó como jugador en Primera en Riazor con la camiseta del Celta de Vigo, que dio en el feudo blanquiazul la rueda de prensa posterior al encuentro que cerró la primera Liga que conquistó el Barcelona de Pep Guardiola, ha ganado seis de los siete primeros partidos del curso. Solo el Real Madrid le arrebató un punto en el Camp Nou justo antes del parón.
El equipo azulgrana, que en la Champions también sacó adelante los dos primeros partidos, se impuso en las tres salidas que ha afrontado, frente al Osasuna, el Getafe y el Sevilla. En esos tres encuentros, aseguró la victoria en los últimos minutos. No se rinde, no se entrega, siempre tiene hambre de victoria. En ese panorama, el Deportivo tendrá que mantener la línea los noventa minutos, ser un equipo intenso, no ahorrarse una carrera. Más que nunca, tiene que rozar la perfección en defensa, juntar las líneas, fomentar las ayudas.
la teoría es sencilla
Saber plantearle el partido al Barcelona parece fácil. Como decía Oltra esta semana, es el equipo al que más se ve jugar, al que más estudia la gente porque es un modelo a seguir, pero el más complicado de frenar, de contrarrestar, de superar.
Ganarle parece imposible y puntuar, complicadísimo. Un sueño que puede hacerse realidad en una noche inspirada en el bando blanquiazul, negada en el azulgrana. Riazor será el centro de atención a nivel mundial, estará lleno de aficionados deseosos de ver una victoria del equipo herculino. Sobra motivación y hacen falta puntos.
El Deportivo se ha pasado todo el parón en puestos de descenso, acumula tres derrotas consecutivas, no gana desde la primera jornada y necesita levantar la cabeza.
Parte de los once elegidos por Oltra para obrar el milagro son una incógnita. El técnico ha revelado que jugará Valerón, pero no quién estará en el lateral izquierdo (Evaldo o Ayoze), en el centro del campo y en la delantera (Riki, Nélson Oliveira). Recupera a Marchena, a Zé Castro y a Abel Aguilar. La empresa de esta noche exige el 200%.
