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domingo, 12 de septiembre de 2021
EL DEPORTIVO COGE VELOCIDAD DE CRUCERO
Calahorra 0-3 Deportivo
Quiles y Miku recuerdan a Carlos Fernández y Quique González, Noel ofrece destellos de un delantero de clase, con una templanza, frialdad y desequilibrio al alcance de pocos, aun menos a su edad, Mackay echa el candado y el Deportivo avanza a velocidad de crucero en Primera Federación. Aun es pronto, pero el equipo ha conseguido en tres partidos que el deportivismo recupere parte de la ilusión que perdió en los últimos años.
Había necesidad de estímulos positivos, no tanto para mantener a la masa social, que siempre ha respondido, sino para volver a Riazor con ganas. Así irá la parroquia deportivista al feudo herculino el próximo sábado a las 19 horas ante el Badajoz en la segunda cita de la temporada como local, la cuarta del curso, en la semana en la que se abre la posibilidad de nuevas altas tras la ampliación del aforo de Riazor a casi 20.000 espectadores.
Cuatro fueron los cambios del tercer once de Borja Jiménez en el Deportivo respecto al que se impuso por la mínima al Tudelano. Este Deportivo es camaleónico en juego, pero también en jugadores. No le convenció, en Tudela, el rendimiento de Alberto Benito, que tuvo una pretemporada accidentada, con confinamiento nada más aterrizar en el Deportivo y, después, una lesión de tobillo por un pisotón; y también se quedaron en el banquillo Diego Villares, William de Camargo y Jaime Sánchez. Este último formaba parte de la alineación, pero se cayó del equipo inicial por unas molestias en el muslo derecho que notó en el calentamiento.
Después de los minutos de tanteo entre el 4-2-3-1 del Calahorra, con derivación a un 4-1-4-1, y el 4-3-3 del Deportivo, los herculinos volvieron a exhibir ese músculo en los primeros minutos que ya se había traducido en goles ante el Celta B y el Tudelano.
La primera llegada con claridad al área rival prosperó. Hay pólvora en la delantera. Quiles puso por delante a los blanquiazules en La Planilla. Lo logró en una jugada larga, con muchos toques del equipo y la combinación de Trigueros, Víctor Rodríguez y Doncel para que el exdelantero del Recreativo de Huelva, de cara, transformara. El Depor ya tenía el partido donde quería.
No obstante, los deportivistas se encontraron un Calahorra respondón, con calidad, que complicó la vida a los de Jiménez por el flanco izquierdo, donde Víctor García, con vocación ofensiva, pasó apuros para frenar a Jon Madrazo, que remató al lateral de la red de la portería de Mackay a los nueve minutos.
El guardameta blanquiazul no necesitó emplearse en esa jugada, pero sí tuvo que hacerlo a los once minutos para mantener la portería a cero en un remate de Zabaleta a centro de Vicente. Mackay se estiró, como ya había hecho en Tudela, y pudo despejar el cuero. Paradas que valen puntos.
El Deportivo logró frenar el ímpetu de los riojanos con más posesión, alejando el esférico de la zona de peligro. Creció el equipo herculino y volvió a asestarle un golpe a su rival a once minutos para el descanso. Doncel sirvió para Quiles, el delantero no pudo conectar con éxito en el área porque metió el pie Zabaleta y el esférico le cayó a Miku, que convirtió con un toque sutil. Protestó el Calahorra, que pidió fuera de juego del venezolano, pero no existía posición antirreglamentaria. Primero, porque estaba en situación correcta y, segundo, porque el balón venía de un contrario.
El Deportivo incluso pudo irse con tres goles de renta al vestuario en otra acción de Quiles, que se abrió paso por la frontal y dejó el cuero para el disparo, centrado, de Juergen Elitim.
Cómodo segundo acto
El equipo coruñés mantuvo el control del partido en la primera fase del segundo tiempo. Anuló al Calahorra y los riojanos tuvieron que introducir tres cambios de golpe a los 57 minutos. En el bando blanquiazul, debutó el último fichaje, Mario Soriano, que sustituyó a Doncel. Las permutas reactivaron a los calagurritanos.
Víctor García siguió pasándolo algo mal en la contención, regaló un córner a la hora de partido y Ugarte cabeceó fuera. Después fue Arias el que probó la seguridad de Mackay con un lanzamiento desde la frontal, más tarde Jorge Martínez, habilitado por Héctor Hernández, disparó fuera un pase filtrado por Álex Arias. Los avisos de los riojanos continuaron, pero de la amenaza no se pasó a los hechos. No solo por las intervenciones de Mackay, sino también por la madera. El larguero ayudó al guardameta en una acción de laboratorio de los locales. Ejecutó Álex Arias, prolongaron en el segundo palo y Ugarte cabeceó al travesaño.
El Calahorra no logró meterse en el partido y el Deportivo tardó en sentenciar. Y eso que la tuvo en una buena transición ofensiva que no pudo concretar con acierto Soriano. Sí lo hizo Noel, que aprovecha los minutos que tiene para asombrar al deportivismo, abrazarlo y, también, alimentar el miedo a que su carrera pegue un giro como la de otras promesas de la cantera que volaron lejos.