El Deportivo se ha vengado en la Copa del Rey (2-1) de su último verdugo en Liga, el Alcoyano, que no se rindió en su visita al estadio de Riazor ni siquiera cuando los coruñeses tuvieron dos goles de ventaja y que trató de forzar la prórroga en los minutos finales.
Cuatro días después de la derrota en Liga, el Deportivo tuvo la oportunidad de tomarse la revancha en la Copa del Rey, aunque poco tuvieron en común los dos encuentros: competiciones distintas, objetivo diferente y alineaciones con muchos cambios, nueve en el conjunto alicantino y siete en el coruñés.
Los blanquiazules afrontaron el partido con más intensidad que el pasado sábado en Alcoy, aunque les costó combinar en el arranque del choque, en el que Riki, en su regreso a la alineación, desperdició una gran asistencia de Juan Domínguez y no pudo superar a Dorronsoro, que logró desviar con el pie a saque de esquina.
El Deportivo no se sentía cómodo con el balón en su poder, pero el Alcoyano no le inquietaba y solo un cabezazo de Xavi Molina en la primera parte alteró el orden en el área gallega en una acción en la que el argentino Germán Lux ni siquiera tuvo que emplearse porque el balón no cogió dirección a portería.
Los alicantinos no daban sensación de peligro pero el Deportivo tampoco hasta que el portugués Diogo Salomao exhibió su capacidad de desborde y asistió al área para que Juan Domínguez, criticado por Miguel Angel Lotina por la poca potencia de su disparo, deshiciera la igualdad con un lanzamiento que se le escapó a Dorronsoro.
Salomao, en posición dudosa, pudo aumentar la ventaja del Deportivo antes del descanso, pero el portero del Alcoyano logró desviar su potente disparo para mantener la eliminatoria con vida en la reanudación.
David Porras refrescó el equipo con la entrada de Monterde a los seis minutos del segundo acto y el jugador del Alcoyano intimidó al Deportivo en el primer balón que tocó con una volea que si hubiera ido a portería habría sido imparable para Lux.
El Alcoyano aprovechó que el Deportivo se quedó con diez durante unos minutos por una lesión muscular del portugués Zé Castro, para ganar metros y acercarse al área del conjunto coruñés, que reaccionó tras la entrada del argentino Diego Colotto y encarriló la eliminatoria al contraataque.
Robó el balón el canterano Juan Carlos en campo propio, sacó su talento con un pase preciso en largo que rompió a la defensa del Alcoyano, corrió veloz Salomao, acompañó la jugada Riki, y, solos ante Dorronsoro, el portugués regaló el segundo gol al madrileño.
El Alcoyano no se rindió y dio emoción al partido a 17 minutos del final con un golazo de falta de Gato, que coló el balón por la escuadra de la portería de Lux.
Los problemas para el Deportivo se agravaron con otra lesión, la del paraguayo Claudio Morel, al que suplió Saúl, pero resistió los últimos coletazos del Alcoyano y, con cierto sufrimiento, se clasificó para la siguiente ronda de la Copa.fuente diario de Pontevedra.@XALOMONTE
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