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lunes, 7 de febrero de 2011

LOTINA ESTA EN UN LABERINTO













Miguel Ángel Lotina vuelve a estar en un laberinto enrevesado, similar al que a finales de octubre del pasado año llegó a desvelarlo impidiéndole dormir durante varios días seguidos. Tras caer 3-0 en Anoeta, en la octava jornada, el técnico no pudo pegar ojo e incluso tuvo que pedir ayuda a los médicos para poder descansar. A duras penas lo logró. Se trasladó con sus futbolistas al municipio de Haro para preparar la ida de la Copa ante Osasuna y en esa pequeña localidad riojana, concretamente en el campo de El Mazo, ensayó por primera vez la defensa de cinco. La estrenó en Pamplona y se acabó convirtiendo en un factor clave en el resurgir del Dépor, que pronto salió del hoyo hasta situarse ocho puntos por encima del descenso. Ahora, el margen es de sólo un punto, sobre todo porque con cinco atrás el equipo coruñés ha perdido la solidez que le aupó a puestos más desahogados. Los catorce goles encajados en las últimas cinco jornadas sitúan al técnico en una difícil tesitura. No sólo porque vuelve a estar cuestionado, sino porque tiene la obligación de dar otro golpe de timón similar al que ideó en Haro. Por eso medita sacrificar un central y retomar la línea de cuatro atrás con la que empezó el campeonato. Urge un cambio y tiene que ser ya.
El Dépor está siendo vulnerable con cinco en cobertura, tanto o más que con cuatro. De ahí que Lotina esté madurando la posibilidad de recuperar el sistema anterior y pasar a jugar sin carrileros, pero con bandas puras, aunque para eso primero tiene que repescar a Guardado, que todavía no estará disponible para recibir al Villarreal. La vuelta al once de Alberto Lopo, quien viajó mermado a Getafe por unas molestias en el sóleo que finalmente le impidieron competir, es otra circunstancia que invita todavía más al técnico a echar mano de nuevo de la defensa de cuatro. En tal caso los sacrificados serían Aythami Artiles, que viene actuando de líbero, y Zé Castro, que cubrió la baja de Lopo en el Coliseum Alfonso Pérez. Por tanto, el catalán y el argentino Diego Colotto están llamados a formar la pareja de centrales de aquí a final de temporada.
Un punto de quince posibles
La última vez que el Dépor formó en el campeonato de Liga con una retaguardia de cuatro futbolistas fue ante el Barça, que se impuso en Riazor con un claro 0-4. Luego Lotina volvió al dibujo con tres centrales ante el Valencia (2-0), Zaragoza (1-0), Sevilla (3-3) y Getafe (4-1). En total, catorce goles recibidos en las últimas cinco jornadas, con un balance de cuatro derrotas y un único empate, el arañado en Riazor ante el conjunto hispalense gracias a un gol in extremis de Laure. Es decir, el Deportivo sólo ha sumado un punto de los últimos quince en juego. Por algo es ahora mismo decimoséptimo, a un solo punto de los puestos de descenso.Fuente la opinion

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