Translate

sábado, 14 de abril de 2012

RECORDANDO LA MANITA EN BALAIDOS








El deportivismo encuentra entre sus mejores recuerdos un 0-5 que paró el tiempo en Balaídos. Aquel 3 de enero de 2004 los blanquiazules descorazonaron a un Celta errante. El orgullo olívico lleva la afrenta tatuada en su memoria.
El equipo de Irureta consiguió alcanzar el corazón de su eterno rival con un dardo envenado. Una manita que para muchos está por encima de algún trofeo, pues sobrevivirá con mayor nitidez al paso de los años. La hinchada del Celta experimentará una sensación conocida en todo el viejo continente, un déjà vu constante asociado al caminar de un artista que al estruendo pone sordina: Valerón.
El grancanario, nunca un gentilicio definió mejor a una persona, dibujó en alzado un pase irrepetible para que la planta de Luque advirtiese al Celta de lo que se le venía encima. Entonces apareció Víctor Sánchez del Amo, un hombre cuyo reconocimiento global está muy por debajo de sus prestaciones. Siempre desde la sombra, Víctor actuaba cuando más calentaba el sol. El día negro de los de Lotina quedó sellado por una rúbrica tan polémica como genial, la de Diego Tristán. Fue una cita para la historia, mágica con unos, cruel con otros.
Ocho años después
El celtismo apela al corazón de muchos de sus canteranos para saldar esa deuda. Unos niños que vieron impotentes la exhibición de aquel Deportivo hoy son hombres que pueden demostrar en el césped su talento. Es difícil encontrar más ganas en un vestuario que las que tendrá el Celta el próximo domingo.
En Balaídos se verán las caras dos referentes históricos que viajan en primera clase para abandonar la Segunda. Dos equipos que viven una rivalidad deportiva con hegemonías alternas. Un derbi cuya ausencia deja al fútbol español desangelado. Los jugadores y las aficiones tienen la responsabilidad absoluta de demostrar al mundo que el lugar de Galicia es el cielo.fuente MARCA. @XALOMONTE

No hay comentarios:

Publicar un comentario