El RC Deportivo completó una nueva sesión de entrenamiento en una semana atípica, sin competición liguera, con la novedad de la evolución de Jaime Sánchez, que ayer compaginó actividad en el gimnasio en solitario con carrera continua sobre el césped, siempre bajo la supervisión del readaptador del club Álex Canosa.
El central andaluz finalizó el duelo ante la Cultural Leonesa con molestias musculares, de las que se encuentra cada día más recuperado.
Los que todavía no se hallan en condiciones de actuar con el resto de sus compañeros son Lapeña, Álex Bergantiños, Miku y Menudo, que prosiguen con sus planes personalizados de entrenamiento.
Borja Jiménez diseñó un test matinal de hora y media de duración en el que el balón fue protagonista por completo.
Después del pertinente calentamiento y una serie de rondos, el plantel se dividió en dos grupos para la disputa de un partidillo con porterías pequeñas (seis).
Otra ‘pachanga’ también con marcos de pequeñas dimensiones pero con un porteros fue el preámbulo del ensayo más fiable, a tres cuartas partes de campo, en el que los futbolistas herculinos pusieron toda la carne en el asador para agradar a su entrenador Borja Jiménez, que no paró de realizar correcciones tácticas a sus futbolistas.
En este sentido, una de las consignas más repetidas durante la mañana de ayer fue evaluar el riesgo de abusar de los pases horizontales.
Al igual que en la jornada del martes, la cantera estuvo muy bien representada en la sesión de ayer, con hasta siete futbolistas procedentes del vivero de Abegondo.
Álex Delgado (que a inicios de semana se estrenó con el primer equipo), Noel, Trilli, Yeremay, Dani Barcia, Brais Suárez y el también juvenil Diego Gómez Pérez pudieron asomarse al escaparate del primer equipo.
Precisamente este último, interior zurdo perteneciente al Juvenil A, tuvo la oportunidad de entrenarse al lado de sus ídolos por primera vez en su emergente carrera.
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