Adrián López, Rubén Martínez y Pedro Mosquera fueron los grandes protagonistas del entrenamiento de ayer.
En el caso del mediocentro, fue noticia por algo negativo, aunque finalmente se quedó en un susto y no parece que tenga mayor importancia.
Justo en la última jugada del partidillo con el que finalizó el entrenamiento, la rodilla derecha de Mosquera impactó con la de otro compañero. El jugador sintió mucho dolor y mostró una cojera importante cuando intentó caminar, lo que provocó que el doctor Carlos Lariño, que seguía la sesión desde la banda, atendiera al futbolista coruñés.
Aunque al principio se temió que pudiera haber algún tipo de lesión, a los pocos minutos, el medicampista sintió alivio y dejó de cojear. Cuando finalizó el entrenamiento, se retiró al vestuario por su propio pie.
“Estoy muy bien, ha sido el golpe solo”, fue el mensaje tranquilizador que lanzó el deportivista cuando abandonó el césped de Abegondo.
A punto
En el lado positivo hay que destacar la evolución de Adrián López y el portero Rubén, que están a punto de recibir el alta médica de las lesiones de las que llevan recuperándose durante los últimos meses.
El guardameta de Coristanco volvió a formar parte del partidillo durante la sesión de ayer y todo apunta a que está listo para entrar en la próxima convocatoria de Cristóbal Parralo, para el partido contra el Málaga, a la vuelta del parón de la competición.
Quien también podría reforzar el equipo para el partido en La Rosaleda es Adrián.
El delantero asturiano todavía está ejercitándose con el readaptador físico, pero ayer tocó balón en los minutos que saltó al césped.
Carles Gil, quien afronta la recta final de la recuperación de su pubalgia, también trabajó con el readaptador.
El extremo valenciano todavía no ha podido estrenarse esta temporada en competición oficial. VIA IG.
En el caso del mediocentro, fue noticia por algo negativo, aunque finalmente se quedó en un susto y no parece que tenga mayor importancia.
Justo en la última jugada del partidillo con el que finalizó el entrenamiento, la rodilla derecha de Mosquera impactó con la de otro compañero. El jugador sintió mucho dolor y mostró una cojera importante cuando intentó caminar, lo que provocó que el doctor Carlos Lariño, que seguía la sesión desde la banda, atendiera al futbolista coruñés.
Aunque al principio se temió que pudiera haber algún tipo de lesión, a los pocos minutos, el medicampista sintió alivio y dejó de cojear. Cuando finalizó el entrenamiento, se retiró al vestuario por su propio pie.
“Estoy muy bien, ha sido el golpe solo”, fue el mensaje tranquilizador que lanzó el deportivista cuando abandonó el césped de Abegondo.
A punto
En el lado positivo hay que destacar la evolución de Adrián López y el portero Rubén, que están a punto de recibir el alta médica de las lesiones de las que llevan recuperándose durante los últimos meses.
El guardameta de Coristanco volvió a formar parte del partidillo durante la sesión de ayer y todo apunta a que está listo para entrar en la próxima convocatoria de Cristóbal Parralo, para el partido contra el Málaga, a la vuelta del parón de la competición.
Quien también podría reforzar el equipo para el partido en La Rosaleda es Adrián.
El delantero asturiano todavía está ejercitándose con el readaptador físico, pero ayer tocó balón en los minutos que saltó al césped.
Carles Gil, quien afronta la recta final de la recuperación de su pubalgia, también trabajó con el readaptador.
El extremo valenciano todavía no ha podido estrenarse esta temporada en competición oficial. VIA IG.
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