EFE. LA CORUÑA 12/04/10 - 17:01.
Sergio González aseguró que la plantilla del Deportivo no se configuró para estar en las posiciones europeas de la clasificación, que ocupó durante medio año de forma consecutiva, sino para mantener la categoría sin apuros. "Parece que Europa es una obligación, por lo que pone la prensa, pero el equipo no se ha configurado para entrar en Europa sino para tener un año tranquilo. No estamos en nuestro mejor momento, sino en el más crítico, apesadumbrados, pero si miramos atrás vemos que estamos en una situación muy privilegiada, que a muchos les gustaría ocupar", indicó.
Afirmó que los malos resultados de las últimas jornadas, en las que el Deportivo ha sumado sólo un punto de dieciocho posibles, ha empañado una trayectoria ejemplar y ha situado al equipo en el lugar lógico. "A principio de temporada hubiéramos firmado estar así, lo que pasa es que hemos generado una ilusión, porque la primera vuelta fue muy buena, que nosotros mismos nos hemos encargado de quitarla. La Liga es un torneo regular que al final te pone donde te mereces y la zona del Deportivo no sé si es la de ahora, dos más para arriba o uno más para abajo, pero estar salvados a falta de diez jornadas ojalá lo consiguiéramos todos los años", manifestó.
"Estar salvados a falta de diez jornadas ojalá lo consiguiéramos todos los años"
Sergio abogó por recuperar la imagen de la primera vuelta en los últimos compromisos de la temporada para que tanto los jugadores como los aficionados se vayan de vacaciones con buen sabor de boca. "Vamos a intentar sumar los máximos puntos posibles. En ningún momento vamos a bajar los brazos, porque el equipo es ambicioso, quiere ganar siempre, y en Riazor queremos ganar para que la gente se vaya contenta con nosotros. No lo estamos haciendo bien y queremos coger sensaciones buenas, la base que tenía el equipo", señaló.
La situación del equipo se agravó con el empate del pasado fin de semana ante el Racing de Santander, que ha alejado a los blanquiazules del sueño europeo, a pesar de que en el primer minuto de partido ya estaban por delante en el marcador. "A nadie le gusta el no ganar en casa y más ante el Racing, ante el que teníamos que conseguir los tres puntos. El equipo lo intentó, pero no estamos en el mejor momento, aunque en cuestión de actitud y ganas no se nos puede reprochar nada. Fue una lástima que cuando parecía que teníamos el partido cerrado llegara ese gol que empañó el trabajo, aunque en el cómputo general el empate es lo más justo", reconoció.
En su mente está ya el partido del miércoles ante el Barcelona en el Camp Nou, un encuentro en el que no cuenta con puntuar debido a la excelente forma del conjunto campeón de Europa, que el sábado arrebató el liderato de la Liga al Real Madrid. "Hay que ir al Camp Nou sabiendo que tenemos los deberes hechos y salir con la cabeza alta y con la conciencia de haber hecho un buen partido. El resultado, por suerte, es lo de menos sabiendo que jugamos ante un equipo en un momento muy dulce", dijo.
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