LAS BAJAS SE HACEN NOTAR

NOTICIA DE SIRO LOPEZ

Visto lo visto en la tarde del pasado sábado, todavía tiene más mérito la clasificación del Deportivo en la actual temporada. Las bajas se hacen notar y ya es demasiada ventaja concederle al rival las ausencias, entre otros, de Filipe Luis, Riki, Sergio, Juca y, a última hora, de Andrés Guardado. Aunque los jóvenes están respondiendo, en algunos casos por encima incluso de lo esperado, es evidente que las lesiones de hombres asentados y con contrastada experiencia en el fútbol profesional se dejan notar en un plantel hecho más para estar en la zona media de la tabla que aspirando, como todavía están en estos momentos, a estar en la Champions el próximo año.


Muchas cosas todavía tienen que pasar de aquí a final del campeonato. Vital recuperar a los ahora ausentes para estar en igualdad de condiciones con equipos que, como Getafe y Atlético de Madrid, nuestros dos rivales tras el partido del martes ante el Sporting de Gijón, todavía mantienen las esperanzas de alcanzar alguno de los puestos que llevan a Europa al final de la Liga. Aunque muchos puedan pensar que, tras lo acontecido en la primera vuelta, ganar, por ejemplo a los getafenses, será coser y cantar, nada más lejos de la realidad. El próximo visitante de Riazor es un plantel de enorme entidad y que tendría que estar luchando con Valencia y Sevilla por ocupar plaza de Champions en un año en el que la irregularidad de valencianistas y sevillanos es más que evidente.

Por lo demás, los tres puntos perdidos ante el Valladolid nos obligan, si queremos estar en números europeos, a arañar alguna victoria más en los encuentros que tenemos que jugar lejos de Riazor. Complicada tarea sobre todo si tenemos en cuenta que hay que jugar, como visitantes, en campos tan ‘sencillos’ como el Vicente Calderón, Nou Camp y Mestalla. Aunque en fútbol no hay nada escrito y lo más complicado es también a veces lo más sencillo, es evidente que la suerte del Deportivo pasa por asegurar los partidos de casa para buscar Europa en los desplazamientos que hay que realizar en la antepenúltima jornada al campo de Osasuna y, ya en la última, a San Mamés para jugar ante el Athletic un partido que puede ser histórico para las dos entidades. ¿Que me olvido del partido de mañana en El Molinón? Con él también cuento y espero que una victoria en el clásico norteño nos haga olvidar el mal trago del sábado ante los de Pucela y nos dé moral en el, para mí, decisivo partido del próximo fin de semana en Riazor ante el Getafe.