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EL DEPORTIVO JUEGA A TRES BANDAS

Hacía tiempo que el Deportivo  no protagonizaba en el mercado una de esas operaciones que Lendoiro solía bautizar con nombres rimbombantes, tipo cantó el mariscal, avecilla, plata-no... Cruces de caminos con varios jugadores y clubes implicados. Ayer, el timón cambió por la tarde y se centró en una jugada a tres bandas con el Deportivo, el Eibar y el Leganés como protagonistas y con Diego Rolan y Marc Cardona como actores principales, o de reparto, según se mire.

La historia es que el conjunto madrileño lleva todo el mercado intentando liberar la ficha de Rolan, que ocupa plaza de extracomunitario. Para darle salida, necesita el beneplácito del equipo que posee sus derechos, el Deportivo. 

La forma de convencer al cuadro herculino podría ser una compensación económica o en especie. Y se plantea lo segundo. Al Deportivo se le presenta la oportunidad de pescar en Leganés (desde el martes se le relaciona con Eraso) y surge un nuevo caladero. Pescador tiene una caña y, si no pesca hoy, pescará mañana, que decía el expresidente. Es cuando aparece en escena (el nombre lo desveló el periodista Javi Torres) el ex del FC Barcelona Marc Cardona, un jugador capacitado para jugar en todo el frente de ataque que se adaptaría a la perfección al 4-3-3 al que ha girado Natxo González. 

La entidad blanquiazul irrumpe con fuerza y otra operación de otro club con el mismo jugador se tambalea. Osasuna tenía un acuerdo con Cardona, pretendía un traspaso y ya le había convencido, pero el Eibar (en el que milita cedido por el Barça con opción de compra) era reticente a dejarle salir. Los vascos, en cambio, abrieron la puerta de salida para dar entrada a Rolan. Y como el Depor tiene el poder de decidir el destino del charrúa, se fija en Marc Cardona, que se deja querer. 

En esa batalla a tres bandas estaban inmersos al cierre de esta edición en un mercado que concluye esta medianoche y en el que los vientos rolan, nunca mejor dicho, y las operaciones se montan y se caen en un abrir y cerrar de ojos. 

Caso cerrado
Aunque ese era el principal frente anoche, hubo más a lo largo del día. De ellos, se cerró uno: Carles Gil fue traspasado a la MLS.  El valenciano, que se había despedido de sus compañeros de vestuario con un mensaje telefónico, continuará su carrera en Estados Unidos. El Deportivo se lleva un ‘pellizco’, una cantidad que le sirve para recuperar parte de la inversión (además rebaja el tope salarial al no tener que pagar la ficha del valenciano, una de las más altas).

El club coruñés también se reserva derechos económicos sobre futuras operaciones con el jugador valenciano.

El Depor no concreta el destino del futbolista, que será Boston, donde defenderá la camiseta del New England Revolution, ni tampoco la cifra del traspaso.

Carles Gil ya no había participado en los entrenamientos de esta semana a la espera de cerrar su salida. El valenciano sopesó su salida del Deportivo este mes y durante ese tiempo de reflexión no entró en los planes de su entrenador. El valenciano, de 26 años, disputó 18 encuentros de Liga esta temporada, 12 como titular.

Gil llegó al Deportivo en la temporada 2016-17 cedido por el Aston Villa inglés y el préstamo se amplió el curso pasado con una opción de compra obligatoria que el club tuvo que ejecutar en 2018, a pesar del descenso a Segunda, por algo más de un millón de euros.

Nahuel
Otra operación sobre la mesa de Carmelo del Pozo ha sido la de Nahuel. El extremo argentino que militó en el Betis y el filial del Barcelona pertenece en el Olympiacos. Su fichaje estaba encaminado, salvo que el de Carmona pueda frustrarlo.

Más Leganés
Juanfran seguirá, si nada se tuerce, los pasos de Gil y acabará en la MLS. Eso sí, defenderá al Portland. A cambio, percibirá un gran salario hasta diciembre. A pesar de eso, la llegada de Eraso del ‘Lega’ al Depor se ha complicado

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DANI GIMÉNEZ: "AHORA SOMOS MÁS VALIENTES EN LOS PARTIDOS"

La veteranía es un grado. Y la experiencia en la categoría de plata, otro valor añadido que confiere a Dani Giménez la autoridad necesaria para opinar acerca del estado de bienestar actual en el que se encuentra instalado el RC Deportivo.

Tercero en la clasificación y a solo un punto del ascenso directo, el meta vigués tiene la convicción de que el club se halla en el sendero correcto, con un novedoso sistema 4-3-3 con el que su escuadra presenta hechuras de mayor ambición y atrevimiento.

“Hemos pasado un pequeño bache, en todos los equipos pasa y esperemos que no se repita, ahora somos más valientes; el equipo es mucho más ambicioso, con esa valentía para apretar arriba, para no meternos atrás. Pasamos problemas puntuales, pero muchas jugadas en que los laterales nuestros apretaban y con un poco de acierto podríamos ampliar la ventaja. Somos peligrosos con posesión pero también en la contra y físicamente estamos bien y llegamos fuertes a los finales de partido”, expuso.

1 Moral restañada tras el triunfo en Gijón
El triunfo del pasado domingo en El Molinón, después de casi cuatro meses sin conocer la victoria, ha servido para recuperar parte de la autoestima perdida en este período de sequía lejos de Riazor.

“Es un partido, lo que queremos es que tenga continuidad, el buen juego en casa y los resultados fuera; hablábamos semana pasada de punto inflexión y ahora es lo mismo, efectivos y serios en un campo difícil y esperemos que este sea un punto de partida para lo que queda”, señaló. 

“El ambiente fue muy bonito, el partido era importante para ellos, hay una rivalidad sana, en el campo se comportaron estupendamente, fue un plus para la gente. Muchas veces parecía que estabas jugando en Riazor y es de agradecer, en la segunda parte los tenia cerca y notaba el aliento, no nos podemos quejar porque los hemos tenido siempre, en momentos de bache no han tenido dudas”, significó.

2 Aprovechar la inercia ganadora actual
Después de haber rubricado dos victorias de modo consecutivo ante Albacete y Sporting, el Depor tiene a tiro la opción de encadenar su mejor racha de la temporada, con una hipotética tercera victoria el sábado ante el Tenerife.

“Es el acostumbrarse a ganar, muchas veces parece una tontería, pero la mentalidad de los jugadores cambia. Muchas veces ganas por inercia. Ahora tenemos oportunidad ante Tenerife, que juega bien, ha mejorado juego pero jugamos en Riazor y tenemos que llevar el mando del partido, ser eficientes, serios y con presión alta para ahogar al contrario. Antes dejábamos jugar a los contrarios y ahora no juegan tan fácil y tienen dudas”, agregó. 

3 Un patrón de juego que favorece al grupo
Desde la perspectiva privilegiada sobre el césped, el arquero blanquiazul asegura que el dibujo adoptado ante Albacete y Sporting ha beneficiado a las características de la plantilla.

“El sistema ha ayudado para encontrar esas posiciones más ventajosas al atacar, esos dos contra uno en banda e incluso ataques en igualdad, pero al final también es confianza. Con el otro sistema tienes que ser más listo, saber cuando atacar o aguantar posición. Cuando se replegaban no encontrábamos espacios, ahora con este sistema es más fácil. Pero también es cuestión de mentalidad, decíamos que teníamos que ser más valientes y apretar arriba, y con este sistema es más natural. Con el otro tenias que contemporizar para que el compañarol llegara a la posición, pero con el otro sistema el mediapunta era brutal. Perdimos un poco la eficacia”, consideró. 

4 Gol extraño encajado ante los asturianos
Preguntado acerca del tanto marcado por Uros Djurdjevic el pasado domingo en Gijón, en una acción en que no hubo entendimiento entre los centrales —Marí y Duarte— y el propio portero, Giménez dio su punto de vista.

“Pablo dice que escucha algo, pero muchas veces los delanteros lo hacen y dijo algo; fue un gol raro, son cosas que pasan, un error de percepción o de pillería del rival”, dijo.

5 Sin caer en el exceso de confianza
Antes de poner punto y final a su alocución ante los medios en la Ciudad Deportiva de Abegondo, el meta deportivista quiso frenar el exceso de euforia que puede haber surgido en el entorno después de la tercera victoria a domicilio del curso y expresó que cada encuentro posee dificultades, tanto el próximo en casa frente al Tenerife como las dos salidas más inmediatas, ante cuadros de arriba en la clasificación como Granada o Málaga.

“Todos los partidos que tenemos que afrontar son muy complicados, no sabes cual va a dar la sorpresa, tenemos que centrarnos en ir siempre partido a partido, independientemente del adversario y el campo donde tengamos que actuar. Granada y Málaga parecen que están fuertes, pero el Alcorcón vuelve a ganar, Osasuna se encuentra en buena dinámica, y el Sporting parecía en mitad de tabla y que no acaban de despegar y están mucho mejor. El ambiente el otro día fue precioso con la gente de A Coruña y Gijón, muy complicados todos los partidos”, concluyó” el jugador

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SIN CARLOS NI VICENTE GÓMEZ

El Deportivo recibirá el sábado al Tenerife en el estadio Abanca-Riazor sin el centrocampista Vicente Gómez ni el delantero Carlos Fernández, que cumplirán ciclo de amarillas y, en el caso del jugador cedido por el Sevilla, tendrá que recuperarse de la lesión que sufrió el pasado domingo ante el Sporting de Gijón (1-2).

Los dos jugadores vieron la quinta tarjeta de la temporada en El Molinón y, en consecuencia, serán castigados con un partido de sanción por el Comité de Competición.

Vicente, que fue titular ante el Sporting y ha formado parte del once en 17 de los 18 partidos que ha jugado con el Deportivo, entre ellos los seis últimos, se perderá una cita con connotaciones especiales para él, acostumbrado a los derbis entre la UD Las Palmas, su exequipo, y el Tenerife.

Por su parte, Carlos Fernández fue suplente en Gijón y ha entrado en una dinámica de lesiones que le han impedido tener continuidad desde que entró en la enfermería a principios de diciembre tras haberse medido al Rayo Majadahonda.

Reapareció ante el Lugo el 6 de enero, fue baja de última hora ante el Mallorca en la siguiente jornada, reapareció como suplente ante el Albacete el día 20, tuvo tratamiento de prevención la semana pasada y de nuevo notó molestias en Gijón, donde disputó los últimos minutos.

Tras el partido, el técnico deportivista, Natxo González, mostró su preocupación, en la sala de prensa de El Molinón, por el estado físico del delantero sevillano. “Lo de Carlos tiene peor pinta”, afirmó el entrenador vitoriano, cuando se le preguntó por el hecho de que tanto el andaluz como Fede Cartabia finalizaron el encuentro con molestias.

En el caso del argentino, el técnico le sentó cuando restaban 23 minutos de partido, a petición del propio futbolista.

Posteriormente, el club indicó en su página web que ambos jugadores acabaron el duelo con el Sporting con “molestias en la musculatura isquiotibial de su pierna derecha”. Sin embargo, en el caso de Cartabia, Natxo González le restó importancia y explicó que “Fede creo que es lo que le pasa todas las semanas, un poco el desgaste”, debido a la naturaleza física del propio jugador y a su falta de continuidad por las lesiones que ha sufrido este curso.

Tanto Carlos como Cartabia están pendientes de la evaluación de los médicos del club.

Saúl es duda
La enfermería se completa con Saúl, Pedro y Krohn-Dehli, quienes se perdieron el último partido de Liga por lesión.

El lateral izquierdo sufre una lesión de grado uno en el bíceps femoral de la pierna derecha, motivo por el que es duda para el encuentro del sábado

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VIDEO DEL ESPORTING 1 DEPOR 2

EL DEPOR MUDA LA PIEL EN EL MOLINON

El Deportivo se soltó, por fin, a domicilio. Dejó atrás la imagen de equipo triste, apático y rácano que se acostumbró a dar lejos del estadio de Riazor. Con mil deportivistas en la grada, jugar en El Molinón fue lo más parecido a hacerlo en casa. Exigía responsabilidad, como había dicho Natxo González antes del partido. Demandaba carácter, ambición, derroche físico. En definitiva, otra actitud, un Deportivo alejado de la versión que dio en Cádiz o Mallorca. Así llegó la primera victoria a domicilio en casi cuatro meses.

El cambio lo transmitió desde el principio. Nada más echar a rodar el cuero provocó el primer córner. Hubo intensidad y verticalidad. Borja Valle, ex del Oviedo, se estiró en ataque y no se encogió en defensa. Una falta dura a Giraldes, castigada sin amarilla, avisó al Sporting de la intención del Deportivo en cada duelo.

Natxo respetó el 4-3-3 con el que el equipo resurgió ante el Albacete con un cambio en el once: sentó al máximo goleador del equipo para alinear a Christian Santos. El venezolano, el delantero de referencia que hay en la plantilla, apartó la ansiedad que había tenido en su último partido como titular.

Y volvió a funcionar la estrategia. A los siete minutos, ejecutó Fede Cartabia desde la esquina, prolongó Borja Valle y cabeceó en el área pequeña Alex Bergantiiños. Esta semana, Armando Palleiro, compañero de este diario, le había anticipado la posibilidad de ver puerta en su regreso al Molinón. “Lo primero sería acordarme de mi hija, que es su cumple el domingo. Yo meto pocos goles y no sé si será el día. No sé qué reacción tendría. Será un día especial en todos los sentidos”, apuntó el de la Sagrada Familia. Hombre de poca fe. Marcó y no lo celebró.

Poco le duró la ventaja a los deportivistas. Incomprensiblemente, en un balón colgado por Hernán Santana se agachó Marí y Djurdjevic anotó por cuarta jornada consecutiva.

Lejos de apagarse, el Deportivo siguió enchufado al partido y se cobró un error del Sporting en la salida del balón. Dio resultado la presión de Borja Valle, robó el berciano, la abrió para Cartabia y este se la devolvió. No la conectó bien Valle pero ahí estaba Christian Santos para golpear con la izquierda, con poco ángulo, y batir a Mariño por el palo corto. De nuevo el Depor por delante y el Sporting a remolque. Tres goles en quince minutos.

Si desconocida era la imagen del Deportivo en ataque, también lo fue en defensa. Una amarilla por pérdida de tiempo condicionó a Dani Giménez desde el minuto 19 de partido. Cuatro después, Duarte y Marí no se entendieron a la hora de despejar y Carmona, que se encontró el regalo en el área, falló en su disparo.

El Deportivo empezó a jugar con fuego, pero supo sufrir. Pudo marcar el tercero con un remate de primeras de Christian a pase de David Simón, pero su balón se fue a unos centímetros del poste derecho de Mariño El Sporting también tuvo el gol en una buena jugada que superó a la defensa del Deportivo y que Babin culminó con un disparo alto.

La segunda parte comenzó como acabó la primera, con el Sporting más entero y el Depor, conteniendo. De una pérdida de Bergantiños, los asturianos montaron un contragolpe que volvió a transmitir sensaciones de fragilidad en la cobertura blanquiazul. Alvaro Jiménez recortó ante Duarte y Cristian Salvador se coló entre la zaga para acabar rematando fuera.

Natxo movió entonces el banquillo para refrescar al equipo. Oxígeno por la banda derecha, donde Edu Expósito, que se había llevado un golpe en la rodilla en el primer periodo, se fue al banquillo para que entrara Didier Moreno, que empezó a la derecha de Bergantiños y acabó a su izquierda, más acertado que en otros partidos. Tampoco era difícil.

El Deportivo desapareció en ataque en la segunda parte. Su primer remate a puerta fue un disparo flojo de Vicente Gómez a los 73 minutos. El canario, por cierto, será baja ante el Tenerife por acumulación de amarillas. Se perderá, así, su derbi particular.

El técnico blanquiazul también cambió el ataque con Quique y Carlos para dar respiro a Cartabia y Christian. Salió a relucir la profundidad de banquillo del Deportivo, garantía de éxito en la maratoniana Segunda División.

El equipo tenía el partido controlado, aunque a poco más de cinco minutos se le pudo complicar con un disparo de Traver tras un mala salida de Dani Giménez. El portero enmendó su error y el Deportivo culminó la faena. El equipo de Natxo González supo llevar el partido a su terreno, con personalidad, aunque también perdió a Carlos Fernández para el encuentro con el Tenerife por lesión y sanción.

Esa será otra historia después de dos victorias seguidas, las primeras de 2019, y de haber puesto fin a la mala racha a domicilio. El equipo coruñés deja al Sporting a doce puntos y el golaveraje y aprovecha los traspiés del Granada y el Málaga (empataron sus partidos) para ponerse, respectivamente, a dos y un punto de ellos. 

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UN DUELO DE OTRO NIVEL

“El Molinón es un gran estadio, un club que, como nosotros, podemos estar aquí de paso en el esta categoría, pero somos clubes de categorías superiores y ganar ahí, hacerlo bien reforzaría todavía más la victoria en casa con el Albacete”, avisaba Vicente Moreno el jueves. El mediocampista blanquiazul lleva razón, pues el estadio gijonés alberga esta tarde un duelo histórico de Primera División, pero que circunstancialmente se desarrolla en la categoría de plata.

Sporting y Deportivo intentan escapar lo antes posible del ‘infierno’ de Segunda y son conscientes de que un triunfo en la batalla que lidiarán hoy supondría un gran espaldarazo a nivel anímico, puesto que se trata de un duelo clave en la pugna por regresar a la élite.

Más de un millar de aficionados respaldarán al equipo de Natxo González en el estadio gijonés, donde los blanquiazules tratarán de poner fin a una racha de casi cuatro meses sin vencer a domicilio. Mucho ha llovido ya desde aquel 1-3 en Tarragona el pasado 30 de septiembre. Cuatro empates y dos derrotas es el balance de los coruñeses lejos de Riazor desde entonces.

Confianza recuperada
El conjunto coruñés afronta el encuentro de hoy tras recuperar su confianza la pasada semana, frente al Albacete. El bajón en el juego y en los resultados en el último mes y medio habían generado dudas en el entorno deportivista, pero los blanquiazules se exhibieron ante el cuadro manchego, al que se impusieron con una superioridad insultante y dejaron muy buenas sensaciones que invitan a pensar que el Depor del primer tramo del curso ha vuelto a escena.

Para lograr la reacción que permitió a los herculinos escalar un puesto en la clasificación y mantenerse totalmente metido en la pelea por el ascenso directo hizo falta cambiar el manual de estilo

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CRISTIAN SANTOS, LA UNICA NOVEDAD QUE BARRUNTA NATXO

A falta de 72 horas para el decisivo enfrentamiento ante el Sporting de Gijón en el estadio de El Molinón (domingo, 18.00 horas), el entrenador deportivista Natxo González considera la opción de introducir en su formación inicial al ariete venezolano Christian Santos.

El tercer entrenamiento semanal reveló las intenciones del míster vitoriano, que medita introducir solo una modificación técnica respecto al once que doblegó con autoridad el pasado domingo al Albacete en Riazor (2-0).

Natxo probó en su sistema 4-3-3 (el rombo parece que quedará aparcado otra jornada) una formación inicial casi idéntica a la de la pasada jornada, con la salvedad de la entrada de Christian en detrimento de Quique González.

El ex del Alavés, de esta forma, obtendría la recompensa al trabajo que está llevando a cabo desde inicios de curso en el día a día de Abegondo. 

No en vano, ya dispuso de minutos frente al 'Alba' —saltó al césped en el 64’—, un envite en el que los cuatro delanteros natos del club coruñés salieron a escena.
La del ‘9’ sería a tenor de los ensayos efectuados ayer en la Ciudad Deportiva de Abegondo, la única novedad prevista de cara al duelo del fin de semana en tierras asturianas.

Tanto el portero Dani Giménez, como la defensa y el centro del campo no experimentarían modificación alguna, mientras que en punta de lanza Fede Cartabia y Borja Valle también conservarían su puesto.
En un segundo once diseñado por el ‘staff’ del estratega vasco serían Quique González, Carlos Fernández y Borja Valle los escogidos para formar en la parcela ofensiva.

Los dos próximos entrenamientos programados para la presente semana serán fundamentales para verificar los planes del máximo responsable técnico blanquiazul, que ayer dispuso un test de noventa minutos en el que conjugó preparación física con rondos, partidillos de posesión y un encuentro once contra once en el que dejó entrever sus intenciones.

Lo que en principio se antoja innegociable es el patrón de juego 4-3-3, que tan buen resultado brindó al club la pasada jornada

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LA PERLA DE ABEGONDO

Edu Expósito se ha convertido en la gran perla de Abegondo. De los futbolistas que han pasado por el Fabril en los últimos años, el catalán es el que más ha conseguido asentarse en el primer equipo y del que más se espera en el futuro.

El mediocampista nacido en Barcelona recaló en el filial blanquiazul en el verano de 1995 procedente del Damm. La madurez que demostró en el campo desde el principio y su calidad le erigieron en uno de los pilares del Fabril y facilitaron su salto al primer equipo. Pepe Mel le convocó por primera vez con el Depor en la derrota de los coruñeses en Mestalla frente al Valencia el 2 de abril de 2017 (3-0), aunque Edu no salió del banquillo. Fue un mes y cinco días después, el 7 de mayo, cuando el catalán debutó con el conjunto blanquiazul. Era la jornada 36 y, pese a que el Depor se jugaba la permanencia en Primera División, el técnico madrileño le incluyó en el once frente al Espanyol en Riazor (1-2). Aunque le sentó en el descanso.

“Si decidí ponerle en Primera en una situación complicada para el equipo es porque confiaba en todo lo que llevaba dentro. Era un futbolista al que simplemente había que darle confianza”, aseguraba Pepe Mel sobre el mediocampista en una entrevista a este diario.

El penoso papel del equipo al curso siguiente, con el paso de tres técnicos por el banquillo y con el pobre juego que terminó provocando el descenso a Segunda, no contribuyó a que el joven futbolista se abriera camino. De hecho, Edu tan solo disputó tres partidos de Liga en la campaña 2017-18 y dos de Copa del Rey.

Sin embargo, en la presente temporada el catalán se ha ganado la confianza de Natxo González poco a poco, hasta convertirse en un jugador fundamental en el engranaje de la medular blanquiazul y ha participado en 18 de los 22 encuentros del campeonato liguero, doce como titular.

Piropos de Vicente
En una entrevista a este diario, Vicente Gómez confesaba que Edu es el futbolista de la plantilla que más le ha “sorprendido”. “Es un jugador espectacular y muchas veces hablo con él y le digo que el equipo tiene que jugar a lo que él quiera. Si es capaz de hacer un año bueno, cuando llegue a Primera va a ser un jugador muy importante porque tiene muchas cualidades, juega con las dos piernas prácticamente igual, tiene balón parado, parece que no pero lucha, lee muy bien el juego. Tiene todo para ser un jugador importante”, afirmaba su compañero en la medular.

Por edad y por condiciones, el barcelonés está llamado a ser un jugador clave en el futuro del equipo coruñés

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EL SUPER DEPOR Y DJALMINHA

VIDEO DEPOR ALBACETE

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LOS CUATRO DELANTEROS EN ACCIÓN POR PRIMERA VEZ

No coincidieron en el terreno de juego a la vez, pero sí actuaron de manera escalonada. Por primera vez en lo que va de temporada, el preparador deportivista, Natxo González, utilizó en un mismo partido a los cuatro delanteros del conjunto herculino.

Hubo cambio de sistema, con un delantero de referencia y otros dos atacantes en los extremos. En la punta estuvo, de inicio, el máximo artillero del equipo, Quique González, que atraviesa uno de esos momentos en que nada le entra. Tuvo ocasiones, alguna clarísima como la falta que abrió David Simón hacia la izquierda y que prolongó Vicente Gómez para que el vallisoletano solo tuviera que empujarla, pero ni con esas. Ha pasado de encontrarse en estado de gracia de cara a la portería rival a haber marcado solo un gol en los últimos nueve encuentros y, además, de penalti.

Su sequía comenzó tras el doblete que firmó ante el Oviedo en el estadio de Riazor en la decimotercera jornada, el 10 de noviembre. Tras reencontrarse con el gol desde los once metros ante el Zaragoza (16 de diciembre), ha enlazado cuatro encuentros sin gol y fue suplente en uno de ellos.

A la izquierda de Quique estuvo Borja Valle en la alineación del partido con el Albacete. El berciano ha aprovechado la baja de Carlos Fernández para hacerse con un puesto en el equipo titular, incluso hasta el punto de haber compartido ataque con el sevillano en detrimento de Quique González. Frente al Albacete marcó su quinto gol de la temporada, un golazo con el que consolidó la ventaja del Deportivo. En el otro extremo, estuvo el primer goleador del partido, Fede Cartabia, que no cuenta como delantero, aunque ya ha jugado en esas posiciones más avanzadas.
El primer cambio de Natxo fue delantero por delantero. Entró Christian Santos, que es el ‘9’ más específico de la plantilla, y se fue al banquillo Quique González. Corría el minuto 65, poco antes de que Borja Valle anotara el 2-0.

Posteriormente, a falta de doce minutos para la conclusión del choque, reapareció en escena Carlos Fernández para suplir a Fede Cartabia. Natxo no hizo el tercer cambio (iba a entrar Didier Moreno). 

No simultáneamente
Lo que aún no se ha dado esta temporada es que los cuatro delanteros coincidan en el terreno de juego a la vez, algo que se antoja muy complicado salvo que en algún partido intente una remontada a la desesperada.

En once de las veintiuna primeras jornadas habían tenido protagonismo tres delanteros del equipo, pero nunca entraron en acción los cuatro de la plantilla hasta que se dio el pasado fin de semana con el Albacete en un duelo directo por el ascenso a Primera División.

De los cuatro, el máximo goleador sigue siendo Quique González con diez goles en 19 partidos de Liga, todos menos uno en el once inicial de Natxo. Carlos Fernández ha disputado 14, 13 como titular, y ha marcado siete. Borja Valle, que estuvo lesionado y se perdió cuatro partidos por sanción, ha disputado 12 encuentros, la mitad como titular, y lleva cinco dianas. El que menos ha jugado es Christian: 11 partidos, dos de titular, un gol

 

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"LA SEMANA SIRVIÓ PARA VER EL TIPO DE GRUPO QUE SOMOS

Fede Cartabia fue determinante en la victoria del Deportivo en un encuentro al que los coruñeses llegaban con dudas.

 

El equipo había ganado solo uno de los seis anteriores encuentros y había perdido posiciones en la clasificación. Recibía al segundo clasificado, un rival directo, y el triunfo era clave. El camino hacia él lo despejó Cartabia. Desde el primer minuto dejó claro que era su día. Estaba con ganas de celebrar su 26 cumpleaños con una actuación redonda.

Exhibió desparpajo por la banda con un taconazo para David Simón, guió al equipo y disipó las dudas. Probó puntería en una falta a media distancia que se fue a unos centímetros de la portería del Albacete. Y en la segunda, en la frontal del área, no falló.

Apenas se alejó del balón. Era un disparo de precisión, de colocación y fuerza. El esférico superó la barrera por arriba y entró ajustada al poste izquierdo de la meta de Tomeu Nadal, que no pudo despejar y, además, acabó impactando contra la madera.

No finalizó ahí su repertorio. Participó, se ofreció y se gustó con el esférico. Volvió a sacar de la chistera otro taconazo, estuvo atento en la presión. Un día inolvidable para un jugador que desea que las lesiones le respeten. Esta temporada y la anterior no le han dado demasiado respiro. Hace poco más de un año tuvo que pasar por quirófano por una pubalgia y la actual la comenzó con mal pie, con un esguince fortuito de tobillo en la primera jornada del campeonato, ante el Albacete en el Carlos Belmonte.

Marqué un gol importante para seguir creciendo y que me da confianza

Reapareció en la cuarta jornada, se lesionó de nuevo en la séptima, ante el Nàstic, volvió a competir en noviembre y otra vez ingresó en la enfermería tras haber dado dos asistencias ante el Atlético Osasuna (2-0). Cartabia, que lleva dos goles y cuatro asistencias en lo que va de Liga, es, como dijo su entrenador, Natxo González, un jugador “diferencial”. Le sobra calidad y le falta continuidad. 

“Me encontré bien y estoy contento porque volvía a jugar, porque se ganó y porque marqué un gol importante para seguir creciendo y que me da confianza”, comentó el día después del partido.

El Deportivo rompió su mala dinámica. “Después de muchos resultados a los que no estábamos acostumbrados, se había generado dudas”, reconoció.

Jugó de extremo, pero pasó de refilón por el cambio de sistema. “Lo importante es ganar. Nos sentimos cómodos en la cancha”, admitió.

Él prioriza jugar. La posición es secundaria. “Quizás el extremo es donde más cómodo me siento porque en los últimos años me he acostumbrado ahí pero no quita que pueda jugar de mediapunta, aportar mi granito de arena ahí. Yo lo que quiero es jugar”, dijo.

Su cumpleaños fue feliz, pero con matices. “Feliz, feliz, no sé, porque es difícil por el momento personal que estoy pasando pero lo tomo como algo positivo en la vida, me dio un regalo que era marcar”, señaló. El tanto se lo dedicó a su hija y a su padre.

Regularme es importante para no recaer y tener la continuidad que busco

A sus veintiséis años, está intentando conocer más su cuerpo para evitar las lesiones que le han atormentado en su segunda etapa como deportivista, la que inició la temporada pasada.

“Sigo regulando. Cuando estoy más cansado de lo normal, paro”, explicó el futbolista de Bombal, que ante el Albacete fue sustituido en la segunda parte, ya con el encuentro resuelto.

“(Regularme) Es importante para no recaer de las lesiones y para tener esa continuidad que tanto busco”, manifestó.

Cartabia pretende conseguir objetivos personales y colectivos en la segunda vuelta. “Estoy contento. Ya lo dije muchas veces, me quieren demasiado para lo poco que han hecho. Espero ser importante, me he quedado para eso, para crecer aquí y volver donde merecemos, pero es un camino que no es fácil”, precisó.

En Riazor se siente “como en casa”. Ante el Albacete asombró a los aficionados con sus recursos por banda y con el lanzamiento de falta del primer gol. “Para un profesional ese apoyo es importante de cara a la confianza que necesitamos”, afirmó.

Tras haber marcado su segundo gol de la temporada, pidió más. “Primero que vengan los resultados, que son lo más importante, y luego uno siempre quiere mejorar sus números. No he hecho goles en el último año, pero los resultados van primero que lo individual”, declaró.

El triunfo fue consecuencia también del trabajo anímico previo al partido. “La semana pasada sirvió para ver el tipo de grupo que somos, el nivel de personas que hay dentro, sirvió para desahogarnos y hemos mejorado en lo que fallamos. Es lo importante. Cuando las cosas no están bien, es bueno que apretemos y estemos todos hacia el mismo lado”, expuso.

El Deportivo necesitaba sumar los tres puntos. “Lo importante era ganar para seguir confiando en lo nuestro. Veníamos de un par de resultados a los que no estábamos acostumbrados, llevamos una camiseta importante y estamos obligados a ganar en todas las canchas”, dijo. 

La siguiente, El Molinón. El Depor no gana fuera desde el 30 de septiembre. Intentará reencontrarse con el triunfo a domicilio ante un Sporting que ha reaccionado “Los retos están para cumplirlos. Tenemos que ir paso a paso. Será un partido muy difícil; ellos están muy bien” .

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RECUPERANDO SENSACIONES

Difícil envite el que tenía hoy el equipo herculino en el estadio de Riazor. Daba comienzo la segunda vuelta y visitaba Riazor un Albacete segundo en la liga y con una impresionante racha de 13 partidos sin conocer la derrota. Racha contraria tenía nuestro equipo, que encadenaba resultados negativos y sensaciones muy negativos a la hora de ver el futuro del equipo.

Y consciente de ello parecía el equipo, que salió en tromba a por el Albacete desde el primer minuto. Es más en el primer minuto ya contó el equipo con dos claras ocasiones, una de Borja Valle que sacó Val y un tiro de Caballo desde lejos. Salía el equipo demostrando que no quería ningún tipo de contratiempo y que quería darle una alegría a la afición en 2019.

Y como en las buenas historias siempre hay un héroe que culmina el propósito de toda una hinchada, la tarde noche de hoy no iba a ser distinta. Y además, toda la afición blanquiazul tenía claro quien iba a ser ese protagonista, no sólo por ser el mejor jugador del equipo blanquiazul, sino por la actitud con la que salió. El estadio aplaudía cada carrera, cada regate, cada asistencia, pero una falta que le hicieron a Edu Expósito cambió el signo del partido. Cogió la responsabilidad y con un sutil toque introdujo el balón en la escuadra. El equipo se ponía por delante con un golazo y refrendaba el dominio que tenía sobre el Albacete. El resto de la primera parte fue plácida para el equipo herculino, con un Albacete que no creó peligro y que en realidad no se parecía al equipo que llevaba 13 partidos sin perder.

En la segunda parte, el Albacete pareció entender que necesita un cambio para intentar meterse en el partido y empezó a intentar dominar el encuentro dando un paso adelante. Un par de acercamientos y un par de tiros sin demasiado peligro que probaban a nuestro portero pero sin demasiado éxito. Fueron unos minutos raros del equipo (que solemos tener en todos los partidos) que el Albacete desaprovechó y que dieron paso a que el Depor volviera a coger la manija del encuentro. De este modo llegó el segundo gol del deportivo, por parte de Borja Valle que terminó de acabar con la moral del equipo albaceteño que dio por terminadas sus opciones en el partido.

De aquí al final del partido fue un monólogo deportivista en el que tuvimos tiempo de dar minutos a jugadores que cuentan con menos tiempo últimamente (Christian Santos y Carlos Fernández) y en los cuales se constató la superioridad del equipo.

La actitud y la pegada de un equipo son aspectos muy importantes para conseguir las victorias tan necesaria para estar arriba y hoy ha sido así. Este es el camino, esta es la manera, esperemos que fuera de casa no se olviden de esta senda. VIA 21 NOTICIAS.

FORZA DEPOR